Quizá te hayas preguntado que tienen los meses de marzo, abril, mayo y junio que encantan a tantas parejas. El factor principal, seguro, es el clima, pero hay muchos más detalles relacionados con organizar una boda de primavera que suman (¡y mucho!), que hoy te revelamos.
La primavera es una de las estaciones más populares para celebrar bodas. Con la naturaleza en plena floración y los días más largos y cálidos, esta temporada ofrece el escenario perfecto para una boda inolvidable. Las bodas en primavera son una excelente opción para aquellos que buscan una celebración mágica y llena de vida.
Flores de temporada, las grandes protagonistas.
Peonías, tulipanes, narcisos, girasoles, rosas…Son algunas de las variedades florales de temporada que pueden encontrarse en primavera. Y es que las flores transmiten una energía positiva en la boda, visten los espacios, aportan un aroma incomparable y dejan a los invitados boquiabiertos.
as bellas flores primaverales son las protagonistas de las bodas primaverales gracias a sus infinitos colores. También tendrán gran protagonismo en la decoración, ya que suelen decorar el arco de la ceremonia, los centros de mesa o los adornos que cuelguen de las columnas. Otra buena idea es sustituir el tradicional arroz por pétalos de flores.
Vestido de novia, vestidos ligeros
Crepés, sedas, gasas, tules, tafetán o gazar son algunos de los tejidos más populares y trabajados en los looks de novia de primavera. Y es que para luchar contra el calor y los cambios de temperatura, las prometidas recurren a diseños transformables o piezas de quita y pon que les permiten sorprender al novio y a los invitados sin renunciar a la ligereza propia de los diseños en esta época del año.
Decoración alegre
Lejos de las tonalidades apagadas más propias de las bodas de otoño o invierno, en primavera son los colores vivos los auténticos protagonistas. Las mesas se llenan de estampados florales y alegres, los que triunfan en las mantelerías más especiales, a juego con las propuestas florales de temporada. Opta por tonos pastel, como rosa suave, azul cielo o verde menta, para reflejar una atmosfera primaveral y la renovación de la naturaleza.
Ofrece un menú ligero y fresco
Destaca ingredientes de temporada en el menú, como aperitivos fríos, ensaladas frescas, pescados o platos vegetarianos con verduras primaverales, para complementar el ambiente de la estación.
Aprovechar la luz
Una boda en primavera implica días largos, más calurosos por el día y frescos por la noche. También la posibilidad de disfrutar de una luz privilegiada sobre todo por las tardes comparadas con las del invierno. La magia de un buen jardín puede ser estupenda para unas fotografías románticas y espectaculares.
¡Al aire libre!
La primavera es perfecta para celebrar los diferentes momentos de vuestra boda en espacios al aire libre, sobre todo si el escenario elegido está rodeado de naturaleza, en nuestra Masía contamos con diversidad de espacios rodeados de encanto. Podéis vivir, por ejemplo, una ceremonia civil llena de encanto a los pies del majestuoso Magnolio; un cóctel de bienvenida exterior; un banquete muy especial en nuestros jardines, en , o el baile final en uno de nuestros patios con vistas a las montañas.
